5 recetas para preparar con cerveza
Hoy traemos 9 recetas con cerveza que te alegrarán la vida en un momento y en cualquier ocasión, además fáciles de preparar.
Que la cerveza es una bebida perfecta para casi cualquier ocasión no es ninguna novedad, pero lo que también es cierto es que se trata de una bebida genial como “caldo” para cocinar platos suculentos, incluso postres.
Y es que la cerveza es ideal para preparar guisos con salsas deliciosas o postres increíbles.
Este chili con carne es un guiso fácil de preparar. Además, es ideal
para llevarlo en el túper.
Si piensas que el famoso chili con carne típico de menús de película americana es siempre un plato ultracalórico estás muy equivocado, al contrario, se trata de un guiso de carne, verduras y legumbres que se puede cocinar con poca grasa y dar como resultado un plato realmente equilibrado y rico hasta decir basta. Además, haciéndolo en casa se puede adaptar la cantidad de picante al gusto de los comensales, por lo que no hay excusa para no disfrutar de este plato.
Ingredientes
Esta receta de chile con carne se puede hacer de dos maneras, o bien cocinando la carne a fuego muy lento durante horas o, si hay prisa, también se puede hacer en la olla exprés y en aproximadamente 1 hora podremos tener el plato en la mesa.
(*) En estos ingredientes picantes puede ajustarse la cantidad al gusto.
Empezamos preparando la carne retirando cualquier trozo de grasa visible y cortándola en trozos de unos 100 g. También debemos pelar la cebolla y la zanahoria y trocearlas junto con los pimientos bien lavados y secos en trozos muy pequeños.
En la olla exprés ponemos a calentar el aceite a fuego medio-alto.
Cuando el aceite esté caliente añadimos la carne y doramos toda la superficie de cada uno de los trozos. Cuando la carne esté dorada por fuera, añadimos los vegetales troceados, ponemos sal al gusto, mezclamos bien y bajamos el fuego para dejar que se pochen durante unos 10 minutos.
Daremos vueltas de vez en cuando y lo dejaremos a fuego medio hasta que la cebolla comience a estar transparente.
Si usamos tomates frescos, aprovechamos para pelarlos y triturarlos (a mí me resulta más rápido usar un rallador con el que enseguida separo la piel a la vez que voy rallando la pulpa). Si se usa tomate fresco es aconsejable que sea un tomate carnoso y con pocas semillas.
Añadimos el tomate rallado/triturado a la olla, damos unas vueltas, añadimos una pizca de sal y subimos un poco el fuego.
Cocinamos a fuego medio-alto sin dejar de remover durante unos 5 minutos para que el tomate se sofría y pierda parte de la humedad, añadimos el tabasco, las especias Tex Mex, el comino molido y el chile, damos unas vueltas, añadimos la cerveza, subimos el fuego a tope para que hierva y, sin dejar de remover esperamos a que se evapore el alcohol. Sabremos que se ha evaporado simplemente guiándonos por el olfato, porque habrá dejado de oler a alcohol, tan simple como eso.
Tapamos la olla exprés, esperamos a que suba la válvula, bajamos el fuego al mínimo y dejamos cocer el tiempo que nos indique el fabricante de la olla. Pasado ese tiempo abrimos la olla y comprobamos que la carne esté tierna, si no lo está la volvemos a cerrar y cocinamos unos minutos más.
Sacamos la carne de la olla y la reservamos mientras dejamos las verduras a fuego lento con la olla destapada. Escurrimos y enjuagamos los frijoles, los añadimos a la olla y los dejamos a fuego lento para que vayan calentándose.
Mientras tanto troceamos la carne siguiendo las hebras de cada uno de los trozos y cuando terminemos los añadimos a la olla.
Añadimos unos jalapeños en conserva cortados en tiras, mezclamos todo bien y dejamos cocinar el conjunto a fuego muy bajo durante unos 10 minutos.
Este chile con carne a la cerveza podemos servirlo con arroz en blanco -es la forma más típica de servirlo- o podemos servirlo con una refrescante ensalada. En cualquier caso, siempre se pueden servir como acompañamiento algunos jalapeños en conserva a mayores para que quien desee un extra de picante pueda servirse a su gusto.
También se podría preparar con carne picada de ternera o mixta en vez de con jarrete de ternera, si lo hacemos así nos ahorramos el tener que sacar la carne y trocearla. En muchos sitios los sirven así, pero a mí personalmente me gusta que la carne tenga presencia.
Una de las carnes más económicas que existen, pero a la vez de las más melosas después de una cocción adecuada, pues queda tierna como la mantequilla. Las carrilleras de ternera a la cerveza son perfectas para preparar un día de fiesta.
La carrillera o carrillada es un corte de carne, normalmente de cerdo o ternera, que se obtiene de los lados de la cara del animal (de los carrillos). Es una carne muy tierna, jugosa y, además, muy barata. Es perfecta para recetas como esta de Carrilleras de Ternera a la cerveza que hoy os vamos a enseñar a preparar.
Ingredientes para 6-8 personas
Esta pieza es considerada casquería pero últimamente está resurgiendo del olvido y cada vez la vemos más en menús de restaurantes y en nuestras bolsas de la compra.
La receta que vamos a preparar hoy es perfecta para lucirnos en una cena o comida con familiares o amigos. Se tarda mucho en prepararla pero es por el tiempo de espera. El proceso en sí es muy sencillo y consiste en cocinar las carrilleras de ternera a una temperatura baja durante muchas horas.
Preparación de las Carrilleras de ternera a la cerveza
Espectacular. Las carrilleras de ternera tienen una carne que queda tan jugosa y tan tierna que se puede partir con el tenedor. La salsa de cerveza es espectacular.
Se puede acompañar de papas asadas o fritas y verduras.
Requiere una buena planificación previa pero ¡sin duda lo vale!
Ingredientes
Durante el BeerFest 2014 podrás pasarte a disfrutar de muy buena cerveza y comida, y entre otras muchas cosas podrás encontrar esta tapa de pollo rebozado en corn flakes con reducción de cerveza y miel que hemos preparado especialmente para este evento, ¡no te lo pierdas y nos vemos por ahí!
Para la reducción de cerveza:
Para el pollo rebozado en corn flakes:
Cuando esté todo listo clavamos el pollo en palos de pincho moruno y echamos la reducción de cerveza por encima. Podemos servir en una jarra de cerveza para demostrar nuestro auténtico amor por esta bebida
Una de nuestras recetas más clásicas, perfecta para asar un pollo y que quede superjugoso es este pollo asado a la lata de cerveza, además, al asarse en esta posición “sentada” el pollo se asa de manera mucho más uniforme.
No es ningún secreto, el pollo cada vez tiene menos sabor. Y ya no vale con irse a uno de corral, tenemos que ir a los mejores pollos de tiendas gourmet para encontrar algo con sabor. Pero esto tiene solución, recurrir al viejo truco de las especias.
Pero las especias no pueden con todo, y otro problema que nos encontramos con el pollo es que al asarlo suele quedarnos una carne muy seca, al menos si lo que queremos es una piel crujiente en el exterior. Pero este pollo asado a la lata de cerveza conseguirá muchísimo sabor a la vez que un pollo tierno por dentro.
Preparar este pollo es muy fácil. Lo primero que haremos será el marinado en la bandeja del horno. Para ello usaremos 2/3 de la lata de cerveza y lo mezclaremos con una cucharada de tomillo, una de pimienta roja y un ajo en rodajas. Podemos añadir más cosas que queremos, yo por ejemplo suelo echar semillas de cilantro molidas y ají, pero si te gusta una especia, úsala para este pollo a la lata de cerveza.
Una vez preparado el marinado embadurnamos bien el pollo con este y lo salamos. Lo dejamos reposar así una hora y estará listo para ir al horno. Para ello tenemos que, literalmente, meterle la lata con el 1/3 sobrante de cerveza en la parte posterior, y dejar el pollo en posición vertical como ves en la foto. Esto hará que la cerveza se evapore e infusione el pollo desde dentro, dándonos esa carne bien jugosa. Tranquilos si no les gusta la cerveza, no coge el sabor.
Para hornear tenemos que meterlo a 180ºC si es un pollo pequeño y 200ºC si es grande. Estará más o menos 45 minutos, aunque depende. Si no tienes termómetro nos vale con fijarnos en la piel, que estará dorada y crujiente.
Pues sí, una tarta de chocolate y cerveza negra que no, no sabe a cerveza propiamente dicha, pero es una verdadera golosina, ya que la cerveza negra potencia el sabor del chocolate y el resultado es sencillamente espectacular.
Pero lo cierto es que el error ha sido tardar tanto en preparar esta receta de tarta de cerveza Guinness y chocolate, porque ha sido todo un éxito y, aunque tiene un intenso sabor a chocolate que es espectacular, curiosamente no sabe a cerveza, sino que esta lo único que hace es potenciar el sabor del cacao.
Para preparar la cobertura de la tarta de cerveza Guinnes y chocolate:
Presentación de la tarta de cerveza Guinness y chocolate:
En caso de emergencia, la cerveza es tu mejor amiga cuando te apetezca una pizza con masa casera pero no tengas levadura a mano. En este caso las levaduras de la cerveza serán suplentes de lujo para la levadura de panadería.
Esta versión es algo menos rápida que la del yogur, pues en verdad lo que vamos a hacer no es exactamente una pizza sin levadura, sino que vamos a aprovechar la levadura de la cerveza para hacer la masa de nuestra pizza.
Para preparar la pizza de la imagen superior: